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Por Alicia Vidal
Hoy fui a ver La Bicicleta Verde en el cine Artemultiplex de Cabildo. No es un estreno pero me había quedado pendiente y la verdad valió la pena. Es una película adorable, tanto como la niña que la protagoniza.
Lo singular es que se trata de una película de Arabia Saudita y retrata un mundo del que muchos sabemos poco y nada.
El foco está puesto en la vida de las mujeres en esa región del mundo pero además con el aditamento de llevar el sello de la propia mirada femenina sobre el tema ya que la directora es mujer.
Todo se centra en la vida de un niña de clase media y su anhelo por tener una bicicleta verde. Pero en verdad la bicicleta es como una metáfora del deseo.
Algo que para nuestra cultura occidental aparece como un deseo medianamente alcanzable y solo supeditado a una cuestión de presupuesto, en Arabia Saudita se convierte en todo un periplo de largo aliento y no pocos conflictos.
Y rescaté algunas frases que sin duda son valiosas por el contraste que sentimos en relación a nuestra cotidineaidad.
La religiosidad es omnipresente y la vida, sobre todo de las mujeres, se desarrolla en una pequeña vía de circulación que les queda libre por fuera de las prohibiciones.
En la entrada del colegio de las niñas la maestra las reprende:
“¿Por qué se ríen? No olviden que los hombres no las deben escuchar reir. La voz de la mujer es su desnudez.”
En el recreo entre las chicas se comentan:
“Debemos irnos de aquí porque los hombres nos pueden ver. Las chicas buenas se meten, las otras se dejan ver”.
En los sones de una canción:
“El paraíso del amor está en tu naturaleza”
Sobre las convicciones:
“Si mueres por Dios sólo sientes un pellizco”
En clases de religión:
“Si estás menstruando no pueden tocar el Corán”
“No dejes el Corán abierto, el diablo lo puede escupir”
En una charla con la madre:
“Si andás en bici no podrás tener hijos”
“Ignora lo que te rodea, recita con tu corazón”.
La película es la historia de una niña valiente, movida por su deseo y bendecida con una gran inteligencia que la lleva a desafiar todos los escollos. La chica, Wadjda, es tierna y cándida pero firme y perseverante, es fundamentalmente querible y por suerte su periplo llega a buen puerto.
Aquí el trailer para ir tomando el pulso del clima de la película.
