Por Alicia Vidal (desde Mar del Plata)
El cineasta francés Claude Lelouch cautivó a la audiencia reunida en la Sala Dauphine del Gran Hotel Provincial en el marco del ciclo Charlas con Maestros del 32 Festival Internacional de Cine de Mar del Plata.
Más allá del cine, Lelouch habló de la vida misma, justamente como un “maestro” y guía. El director dirigió 59 películas y ya planea su próximo film, tal vez eso de mantener un proyecto vivo es lo que lo mantiene tan jovial y activo a sus 80 años recién cumplidos.
Para los más jóvenes puede resultar un nombre desconocido pero para los que pasaron los cincuenta seguramente lo asocian con la gran obra “Los Unos y los Otros” donde se destaca la presencia de Jorge Donn que baila el Bolero de Ravel bajo la dirección del coréografo Maurice Béjart.
Y justamente sobre esta película Lelouch aclaró que el bailarín argentino supo interpretar desde el principio el espíritu del film: “cuando nos reunimos él se puso a bailar el bolero de Ravel de manera espontánea, y se trata justamente de una música que refleja el sentir y el latido del corazón, es la melodía de la vida”.
No quería hacer una película alrededor de una persona pero al final diría “todo giró en torno a Jorge Donn”.
La próxima película sobre la cual está trabajando Lelouch se llamará “Si y No” según adelantó el cineasta francés. “Toda la vida misma es un Si y un No. Siempre hay que elegir y decidir entre una y otra opción. Y también debo agradecer a todos aquellos que me dijeron que no que me permitieron llegar a todos los que me dijeron que sí y así logré filmar más de cincuenta películas”.
Por otra parte, el maestro del cine francés célebre en los sesenta por su obra magistral “Un hombre y una mujer”, aclaró que en ese entonces buscaba retratar la vida directa de la gente común, no pretendía una actriz y un actor (por eso se ufana de haber rechazado trabajar en su momento con Romy Scheneider).
“Filmo la vida con sus imperfecciones, busco las emociones, hago cine de autor. Amo la libertad, lo imprevisto. No como en Hollywood donde se hacen películas de producción. Eso sería traicionarme y yo jamás traicioné al cine, es a lo único que le fui absolutamente fiel. “
Para Lelouch todo gira en torno a la vida misma e incluso el expertise de dirigir cine estaría al alcance de todos. “Todos somos cineastas, es un oficio totalmente natural, basta con ser curiosos. Nuestros ojos son las cámaras y el cerebro es lo que permite el montaje”.
“La vida es el mejor guión que podemos tener” afirmó Lelouch, quien además agregó: “vivo la vida como una historia de amor”.
A su vez, el cineasta que también dirigió “La Aventura es la Aventura” se despachó con otras reflexiones muy trascendentes sobre el rol del cine.
“Con la boca se puede mentir o se puede decir la verdad, en cambio, con los ojos, se dice la verdad. Y el cine trabaja sobre la mirada, sobre el plano corto, a diferencia de lo que pasa con el teatro donde prima la palabra. Para mí, no hay reglas, mi única regla es la libertad y allí está la verdad. Me interesa la sincronía entre el decir y el sentir”.