Nicolás Cuño presenta #conexiónreal, el corto que dirigió junto a José Cicala, protagonizado por Guillermo y Nicolás Francella, que fue seleccionado para proyectarse en la sección Blood Window en el Festival de Cannes de cine. El cortometraje, devenido en campaña de la marca de indumentaria Key Biscayne, propone despertar conciencia sobre el uso responsable de la tecnología.
Key Biscayne es en principio un sueño compartido entre amigos. Lo valioso es que al día de hoy Nicolás Cuño y Martín Lief mantienen intacta la matriz emocional que los llevó a construir una marca de moda que se propone vestir cuerpos sin traicionar el alma. La sensibilidad fue siempre el motor de esta dupla que construyó a través de la moda una voz potente para comunicar valores y promover un estilo de vida. Un recorrido por la historia de Key Biscayne pone de manifiesto el espíritu de esta marca que se articula a partir de mensajes con alto valor icónico destinados a construir sentido.
Cada colección representa no sólo un desafío creativo, también es una poderosa oportunidad para comunicar. Esta vez la temporada sumará un recurso potente para despertar conciencia sobre el uso de la tecnología, se trata de un corto protagonizado por Guillermo y Nicolás Francella y dirigido por Nicolás Cuño y José Cicala (socio del estudio Machado Cicala Morassut), que presentarán en el Festival de Cannes y que recreará escenas en las que seguramente todos nos sentiremos reflejados. “La idea nos surgió del malestar que detecté a partir de mi propia experiencia – explica Nicolás Cuño- De repente me vi a mi mismo contestando mensajes por celular mientras estaba manejando con mi mujer y mi hijo recién nacido en el asiento de atrás del auto. Me dije a mi mismo de no hacerlo más y sin embargo al otro día volvía a reincidir y encontrarme en la misma situación, se volvía a repetir. Un día vi a mi mujer amamantando a nuestro hijo y respondiendo un llamado del celular… Escenas de ese estilo se repetían y el poder del hábito solía ganarle a mi deseo de modificarlas. Comencé a mirar a mí alrededor y empecé a hacer consciente la interferencia con la que nos acostumbramos a convivir. Fue entonces que sentí la necesidad de aportar un mensaje destinado a despertarnos, a reflexionar.
Necesitamos tomar conciencia, modificar hábitos para vivir mejor. Estamos a favor de la tecnología, pero debemos usarla para beneficiarnos, no en nuestra contra”.
Reunir a Guillermo y Nicolás Francella representaba un gran desafío puesto que después de haber filmado «Corazón de León» padre e hijo no volvieron a trabajar juntos. Sin embargo, el tema del corto logró el compromiso de esta dupla actoral que suma talento y capacidad expresiva para un mensaje que elije el arte como camino para despertarnos y hacernos reflexionar sobre la naturalización del desencuentro, el ensimismamiento y el autismo social que ocasiona el mal uso de la tecnología.
